Oryx, un antílope que hace frente a la sed y al calor extremo
hace 1 añoSus cuernos son curvilíneos y anillados y, en contraposición, sus orejas pequeñas. Son lo que más llama la atención del oryx, el protagonista de este mes en nuestro blog. Este animal es un antílope de gran tamaño que en su edad adulta puede llegar a pesar 300 kilos. Su morfología destaca por tener un cuello ancho con crin, pezuñas aplastadas en forma de pala que facilitan su desplazamiento en la arena y unas patas muy largas gracias a las que mantiene un galope sostenido durante muchos kilómetros.
De forma general, su piel es blanca y una gran mancha marrón alrededor del cuello. Con respecto a su altura, tanto los machos como las hembras suelen situarse en torno a los 80 centímetros, sin contar la longitud de los cuernos.
Su hábitat se localiza principalmente en zonas desérticas o semidesérticas del continente africano. Por ello, son capaces de aguantar la sed y las temperaturas extremas. Como particularidad, su cuerpo no absorbe el calor, sino que lo irradia al ambiente gracias a un sofisticado sistema sanguíneo que permite que la sangre más fría sea la que riegue el cerebro tras pasar por los orificios de la nariz.
Son herbívoros y se suelen comer la vegetación del ecosistema en el que se encuentran. Por ello, en su dieta no faltan pastos de gramíneas de todo tipo, raíces, tubérculos y algunos frutos que pueda encontrar por el entorno.
Su esperanza de vida está en unos 20 años en su hábitat salvaje, aunque en cautiverio puede llegar a alcanzar entre 25 y 30 años de longevidad. Vive en manadas de entre 15 y 30 animales guiados por un líder macho y son capaces de desplazarse hasta 1.000 kilómetros si es necesario. En cuanto a su apareamiento, las hembras solo tienen una cría por embarazo tras ocho meses de gestación que puede pesar entre 9 y 15 kilos y es destetada tras cumplir tres meses y medio.
Debido al pequeño número de animales que quedan se considera una especie casi extinta.